JustaCupofCoffee

polvo “al parecer no miraba el cuadro” pensé.   - estoy bien, fue el polvo… post data… me vengaré… ¿comenzamos?- dijo cubriéndose la nariz y parte de su sonrisa, me levanté dispuesto al trabajo únicamente para encontrarme con Leonor quien me golpeó con la misma almohada en el rostro -ahora estamos a mano- se rió y abrió las ventanas, nos dedicamos a esta tarea por un buen rato, me ayudó sacando las ropas de cama, colocando las prendas en una caja y en general llevando la mayoría de pertenencias de mis padres al pasillo para llevarlas a un sitio donde regalarl

Todo quedó en el más absoluto silencio “¿tan ofensivo fue mi comentario?” no sabía qué hacer, quería disculparme pero no podía irrumpir en su encierro. Nervioso comencé a caminar por la casa, cada instante de esta espera se sentía como un puñetazo en el estómago, poco me habría imaginado entonces los momentos que me tocaría experimentar a su lado… De  pronto me siento fatal, mi cabeza comienza a doler a un compás palpitante y mis piernas tiemblan, asumí que el estrés de la universidad sumado a las recientes emociones me estaba pasando la cuenta

Cuando desperté noté un extraño calor alrededor de mi cuerpo, de pronto estaba en mi cama y Leonor estaba abrazada a mí, no sé cómo o por qué estaba ahí, pero ni me di el tiempo para pensarlo, cuidadosamente me solté y salí de la cama con el miedo de despertarla y causar un alboroto, tal parece que era sonámbulo u algo por el estilo, ella no pareció inmutarse con el movimiento, gran alivio, no quería ni imaginar las consecuencias de una estupidez como esa, seguido fui a la cocina para preparar un desayuno, actividad en la que había perdido práctica dada mi poca costumb

...Nuevamente una noche sin sueño, y como tal, una muy larga también. Estuve planificando todo cuanto quería decirle y las posibles respuestas que podría obtener, malas costumbres de antaño supongo, al rendirme finalmente en mis esfuerzos por dormir decidí tomar mi celular y escuchar algo de música al tiempo que miraba a algún punto en el vacío por varias horas, simplemente revisando canción tras canción, algunas nostálgicas y otras que ni recordaba haber puesto en mi dispositivo, me entretuve en un juego personal de colocar aleatoriamente algunas canciones e imaginarme los eventos d

... -¿Cuántas veces has estado aquí?- ella suspiró y tanto su semblante como su tono de voz parecieron calmarse, aunque las palabras que siguieron a esta acción solo dieron cuenta de la distancia que acababa de establecerse –veo que es evidente… incluso a los ojos de un extraño… gracias por el café- comenzó a retirarse –¡Espera un poco cua…- se quedó completamente quieta y por sobre su hombro surgió una voz muy diferente a la anterior, muy seria –el hablar con un completo desconocido es un gran alivio, no hay vergüenza, no temes al daño que te